AMOR

Morir como nieve de invierno,
renacer como lluvia de primavera,
caer como hoja de otoño,
brillar como rosa en verano.

Esperar el tiempo pasado,
descubrir la belleza en la espera,
añorar las noches y el sueño,
hacer de tu vida, todo.

Sentir que nada ha pasado,
al ver el cielo en tus ojos,
esperar sin notar el tiempo,
hablarte sin saber como.

No oir
sino es de tu boca,
sentir tu cuerpo lejano,
recorrerte con los ojos,
aunque nunca jamas nos veamos.

Canto triste

La muerte,
el general arengando,
a los niños asustados.

Otra quimera perdida,
otra muchacha llorando.

Una baza jugada
en una partida sin suerte,
la nostalgia de un mañana
para volver a la vida.

Mi padre y yo sepultados
en la misma caja vacía.
Un disparo solitario
que rompe un cuerpo destrozado.

Un arbol quemado
por un incendio sin fuego,
un libro que no lee nadie,
un juego jamas jugado.

La niña que fué acunada
por el padre asesinado,
la injusticia vencida
por el justiciero sojuzgado.

Una flor que rebrota
en un campo achicharrado
y un soldado que la pisa
al atacar, cuchillo en mano.

"Hay quien se pasa la vida entera leyendo sin conseguir nunca ir más allá de la lectura, se quedan pegados a la página, no entienden que las palabras son sólo piedras puestas atravesando la corriente de un río, si están allí es para que podamos llegar a la otra margen, la otra margen es lo que importa"
Jose Saramago - La caverna

Vida

Grite al viento
y el viento me oyó,
me devolvió tus abrazos
tus sonrisas
y tus besos olvidados.

Lloré al mar
y el mar me sonrió
me trajo la sal,
la vida
y la esperanza de amar.

Cante al cielo
y el cielo me habló,
me recordó los días
en los que el tiempo
era nostalgia y dolor.

Hablé al río
y el río me abrazó
me trajo tu calor,
tu risa
y el despertar del amor.

Imaginaciones

Nunca buscaste la verdad,
la realidad no interesaba
tu mundo solo era
ilusiones y sueños.

Escuchar una canción,
esperanzas,
certezas imaginadas,
un libro sobre la mesa,
era mejor que un plato lleno.

Llorabas con cualquier historia
fuiste protagonista
en aventuras soñadas

La realidad era el espacio
entre ilusión y sueño,
y ahora tras este salto
te sumergiste en el suelo.

Instantes

El y ella,
la flor y el aire,
el reloj y la espera,
una mirada perdida,
una palabra soñada,
un sentir,
volver a reír
al ver una cara sucia,
una almohada y un colchón.
El vacío,
una lágrima en la lluvia,
la esquina al final de la calle.
Nada.
Todo.